Proyecto Patrimonio - 2008 | index | Armando Roa Vial | Autores |





Duendes y demonios

Por Iván Quezada
La Tercera Cultura, sábado 23 de febrero de 2008

El poeta Armando Roa Vial vuelve a la escena literaria con la reedición de casi todos sus libros, celebrando así sus 40 años: "Me siento empezando de cero", explica.


Como en sus comienzos, Armando Roa Vial (41) sigue siendo de los escritores que necesitan del estrés para hacer libros. Y, claro, por eso las cosas se han complicado más de una vez. Como cuando escribía los poemas de El Apocalipsis de las Palabras o La Dicha de Enmudecer (1998). Esa vez, con los embalajes producidos tras la muerte de su padre, el psiquiatra Armando Roa, perdió los originales y tuvo que reconstruir de memoria los poemas.

"¿Si acaso fue un acto fallido? -se pregunta con una sonrisa- No lo sé, pero el caso es que encontré mis viejos papeles recién hace unos meses y entonces decidí reeditar el libro porque creo que en él se anuncia lo que vino después: la intertextualidad, el silencio como motivo poético, la traducción de los clásicos...".
El hallazgo le permitió duplicar el texto con 20 poemas nuevos y, además, lo obligó a reformular lo publicado y a reeditar una parte importante de sus libros, "como un modo de revi-sitar el trabajo realizado: ningún libro es definitivo, porque la literatura es un borrador. Siento que a esta edad vuelvo a comenzar de cero".

Este año lleva a imprenta, aparte de El Apocalipsis..., Elogio de la Melancolía (1999) -al que agregará la traducción de dos poemas de amor de Borges, los únicos que escribió en inglés, y una extensa entrevista al poeta Leopoldo María Panero-; El Navegante (1999), su eficaz traducción del poema anónimo anglosajón; Cánticos al Sol, la antología de Ezra Pound de 2003, a la cual sumó las versiones de Pound del mismo Navegante y de El Lamento del Guardia Fronterizo, poema tradicional chino. Y falta mencionar El Mito y la Sombra (2001), especie de novela inspirada en la música clásica; Poesía Escogida de Robert Browning (2001), con nuevas traducciones del vate, y dos obras nuevas: una con traducciones de poetas de ingleses junto a Marcelo Pellegrini, y la otra, Ejercicios de Filiación, que define como "una colección de palimpsestos a partir de monólogos de figuras literarias que crearon una estética con la cita".

Aparte de todo esto, Roa es el coordinador de la carrera de Literatura en la U. del Desarrollo. Pero es de quienes duermen cuatro horas al día. Y ahora acaba de retomar sus estudios de guitarra, otra manera de luchar contra el tiempo libre, que a su juicio lo dispersa. Incluso dice que teme más a "los demonios del tedio que a los duendes de la presión".

Quizá su consuelo ante el cansancio sea la lectura. Antepone su condición de lector a la de escritor y, por eso, se confiesa un abusador de la intertextualidad, que le sirve para poner en jaque el dogma de la autoría. "La poesía se hace con muchas voces", puntualiza, desechando el ego como motivación central. Y para comprobarlo, ha asumido otro proyecto: traducir Moby Dick, de Hermán Melville. Después de todo, le hubiese encantado ser novelista; pero fue poeta.

 

 

 

Proyecto Patrimonio— Ańo 2008 
A Página Principal
| A Archivo Armando Roa Vial | A Archivo de Autores |

www.letras.s5.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez S.
e-mail: osol301@yahoo.es
Duendes y demonios.
A propósito de la poesía de Armando Roa Vial.
Por Iván Quezada.
La Tercera Cultura, sábado 23 de febrero de 2008.