Mi departamento tiene vista hacia al este y esta mañana tengo sol,
apostado a una ventana contemplo el espléndido follaje de los árboles.
El verano ya se termina, pronto las hojas comenzaran a caer, sus ramas
quedaran desnudas, la atmosfera de mi calle se volverá más gris y
fría…. Ya es hora que me instale en mi mesa de trabajo; prendo el
ordenador, mi aparato es lento, mientras espero que los programas
funcionen en mis oídos resuena el graznido persistente de unos
cuervos…Word aparece por fin en la pantalla, intento olvidarlos y
comienzo a revisar mis notas, antes de comenzar a teclear mi texto…
Meses atrás abordé la lectura de la correspondencia entre Albert Camus y
María Casares. Ochocientas sesenta y cinco cartas en total. Fue una
lectura muy interesante, además de esta relación sentimental, este libro
describe el medio literario y teatral francés desde mediados de los años
40 hasta fines de los años 50. Desde entonces me quedó una cierta
afición por este tipo de obras. Hace unos días reincidí con los Diarios
centrales A Season in Hill 1966-1980 de José Donoso (negociados
antes de ser escritos, si entendí bien). Experiencia nueva, para mí, con
la obra de este autor, a medida que los leía mi mal humor iba in
crescendo. Una sensación que solo había experimentado con los libros
de Roberto Bolaño. La mayor parte de las cosas que Donoso cuenta, en
estas páginas, transcurre en España, donde pese a todas sus
lamentaciones, su empresa Donoso Ltda. gozaba de excelente salud.
Who is who, en los negocios todo es cuestión de relaciones, su agente
literario era Carmen Balcells, who is who, conocía muy bien el medio
literario latinoamericano, además daba clases en universidades
estadounidenses. Dicho esto, vivir de la pluma no es fácil. No obstante,
un aparente buen pasar, ingresos en dólares y una cuenta bancaria en
Suiza, en esta paginas se percibe una cierta inestabilidad económica.
Estos Diarios centrales tienen la ambición de mostrar su proceso
creativo, misión cumplida, Donoso lee a otros autores, reescribe y
corrige mucho, nada en especial, este es el abecedario de cualquier
autor que trabaje con seriedad. Laureado en 1990 con el Premio
Nacional de Literatura, José Donoso es un autor muy valorizado en
Chile (¿demasiado?). Yo no tuve el grandísimo honor de participar en
sus talleres literarios, en esa época mi vocación literaria era embrionaria,
si no recuerdo mal, tal vez me equivoqué, una vez lo vi en la estación
Mapocho, durante una de las primeras ferias del libro; no estaba
firmando autógrafos ni interviniendo en algún debate literario, estaba
sentado en una silla con aire ausente. Podría decirse que estos Diarios
centrales son una especie de Reality show literario. Donoso, bisexual,
reconoce, en estas páginas, tener encuentros homosexuales
ocasionales, pero ninguna relación estable; un lector suspicaz podría
encontrar pistas que apuntarían a lo contrario… No obstante, su
temperamento artístico parece ser un individuo cargado de prejuicios,
Margarita Aguirre, biógrafa de Pablo Neruda, es una mujer gorda y con
cara aindiada, una descripción impregnada de racismo y desprecio de
clase. Verdadero mártir de la literatura, la vida conyugal de nuestro
ilustre escritor nacional no era fácil para nada, pero él nunca era
culpable de nada, María Pilar Serrano era una vieja borracha y
depresiva, Donoso parece envidiar la suerte de Louis Aragon, autor de
encendidos poemas de amor dedicados a su esposa Elsa Triolet, que
una vez viudo pudo vivir plenamente su homosexualidad. María Pilar era
alcohólica, de acuerdo, su hija también lo dice, pero como no serlo,
cuando tenían un compromiso social (mujer macetero), su marido
decidía como debía vestirse. Donoso además de manipulador podía ser
violento…. Dudo que María Pilar fuese un estorbo para el trabajo de
nuestro ilustre escritor nacional, además de ocuparse de los asuntos
domésticos al igual que la esposa de León Tolstoi, le servía de secretaria y
dactilógrafa, y, factor no desdeñable, también podía contribuir
financieramente con sus traducciones. ¡Donoso temía que su suegro le
borrara de su testamento …, es desagradable constatar su aversión por
España y los españoles, un país donde vivió muchos años. Formulo
preguntas que, por cierto, no requieren en absoluto respuesta: ¿Qué
documentos presentó para obtener la residencia? ¿Cuestión salud, era
beneficiario del sistema de seguridad social español? ¿Qué pruebas de
solvencia y moralidad tuvo que presentar para adoptar a su hija Pilar?
(dudo que en Francia su perfil socioeconómico le hubiera permitido
efectuar esta adopción). Donoso fue uno de los artífices del Boom latinoamericano. No obstante, unas apariencias amistosas, cartas y
fotos apoyarían esta versión de la realidad, no aprecia mucho a sus
colegas escritores, según él, se declaraban de izquierdas solo para
promocionar sus libros… La verdad suele esconderse en los
intersticios, yo me permito dudar un poco de la firmeza de sus
convicciones democráticas. La elección de Salvador Allende a la
presidencia de la república no parece entusiasmarle mucho, piensa que
puede haber un golpe de estado, ¿Clarividencia política o deseo
inconsciente que haya uno? Sus Diarios centrales ignoran el
fusilamiento de cinco militantes antifranquistas. Este triste
acontecimiento ocurrió el 27 de septiembre de 1975. Tras una larga
agonía, Francisco Franco murió el 20 de noviembre 1975, el pueblo
español festejó esta noticia en los bares ¿En qué universo vivía Donoso
en esos momentos? Como estimé que a esta obra le faltaban
demasiadas piezas, después que terminé de leerla pasé (gracias
Amazon) a Correr un tupido velo, el testimonio de su hija adoptiva, que
confirma la precariedad económica, en casa de Donoso el rancho no
era muy bueno, Pilar comía mejor en casa de la empleada doméstica,
donde además podía ver la televisión. ¿Los hijos pueden ser biógrafos
objetivos de sus padres? A mi modo de ver, Pilar no corre el velo por
completo. Algo que no se le puede reprochar en absoluto. Es normal
que el sentimiento filial se imponga a la razón. Todos conocemos el fin
trágico de Pilar, pese a unos artículos de Letras Libres y el Clarín de
Buenos Aires, que intentan embellecerla, la historia de la familia Donoso
es extremadamente sórdida. Begoña Gómez Urzaiz, periodista de La
Vanguardia de Barcelona, pondría las cosas en su lugar con su artículo
Los Donoso o el peligro de escribir las vidas. ¿Un trastorno de
personalidad narcisista? Coincidencia, para mí, el perfil psicológico de
Donoso que se desprende de estos Diarios centrales, me resulta muy
familiar. Inseguridad, hipocondría, egocentrismo, ausencia de empatía,
insensibilidad afectiva, un pariente político mío reunía todas estas
características. Al igual que Donoso un día se fue también de viaje por el
mundo, considerando que los tanques soviéticos no tardarían mucho en
desfilar por los Campos Elíseos, se fue a vivir a Ciudad de México,
donde durante unos años ejerció el noble oficio de panadero. Escritor
aficionado, durante su vejez publico unas memorias que intitulo Les
tribulacions d’un francais de l’étranger, mis comentarios críticos no le
agradaron para nada… Indirectamente, le debo mi nacionalidad
francesa, una nacionalidad que pende de un hilo, él nació en Barcelona,
en estos tiempos xenofóbicos, que vivimos, es preferible ¡Que no
ahonde demasiado en su árbol genealógico! Característica muy suya:
durante más de cuarenta años vivió enclaustrado en su departamento,
solía decir que saldría “con los pies por delante”, un vaticinio que se
cumplió, en el mausoleo de su familia, todavía quedaban sitios
disponibles, sus restos mortales yacen en el cementerio de Père
Lachaise. El escritor, que intento ser, no podía pasar por alto esta
historia. Su estilo de vida me inspiró Agorafobia, un cuento que espero
que mis no muy numerosos lectores hayan apreciado… Atraído por sus
orígenes peninsulares, Donoso viajo a Extremadura, donde habría sido
recibido con mucha amabilidad por un noble de la zona. Su ego
hipertrofiado debe haberse ido a las nubes …. Yo nunca haría un viaje
como este, lo encuentro patético. En Cantabria hay dos pueblos que
llevan mi nombre, pero casi no hay Aguayos en la zona, en Andalucía,
tierra mora, hay muchos más, Agua- yo podría ser un apellido de
cristianos nuevos, una población mucho menos honorable y
prestigiosa… Nuestro ilustre escritor nacional afirma que su apellido es
“troncal”, en Chile habría Donoso en todas las clases sociales, muy bien
visto, el primer apellido de mi abuela materna es Donoso. A esta
abuela, que no conocí, le dedico un cuento que escribí con “mucho
sentimiento “como dicen los cantantes de boleros …
Las obras de José Donoso se cuentan entre las primeras piedras de mi
edificio literario, pese a la infinidad de libros que he podido leer después,
lo más probable es que continúen siéndolo, dicho esto, desapruebo
cualquier intento de “beatificación”, salvo los grandes clásicos, cualquier
autor puede ser olvidado, relegado a un segundo lugar, o derechamente
ser expulsado del olimpo de las letras… El reloj de mi ordenador indica
que ya es mediodía, tendré que apagarlo, mi refrigerador está
prácticamente vacío, tengo que ir al mercado a hacer algunas compras.
En el camino me voy a topar con los cuervos, cuando el día este
nublado sus vuelos en bandada le dan a mi barrio un toque siniestro. En
Francia existen dos especies de cuervos, los corbeaux (corvus corax) un
poco más grandes y de graznido grave y las corneilles (corvus corone),
más pequeños y más chillones. La denominación exacta me importa
poco en realidad, cualquiera que sea esta, estos pajarracos me
recuerdan demasiado una película de Alfred Hitchcock.