El leve aliento de la verdad de Díaz Eterovic
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El leve aliento de la verdad narra la historia del detective Heredia, quien tras la muerte del periodista Julio Segovia, se hace con un caso mayor, el cual involucra un mercado más peligroso, el de la prostitución y el narcotráfico.
El último relato de Ramón Díaz Eterovic, editado por Lom, es la decimocuarta vez que tiene a Heredia como su principal protagonista, siendo la primera allá por el año 1987 con La ciudad está tríste.
Un nuevo caso para Heredia que deberá salir de su oficina tras la pista de una serie de culpables que serían los principales actores de una serie de asesinatos de algunas que ejercían la profesión más antigua del mundo. Muy cerca de su sector, han encontrado, junto a los cuerpos de las víctimas, copias de Psicosis, una película de Hitchcock. Más que suficientes pistas para dar con el asesino.
El autor chileno, nacido en Punta Arenas, ha declarado que sus historias son basadas en la realidad de su país, ya que la prensa permite realizar buenas tramas criminales. Según Díaz Eterovic, en ciertos aspectos pareciera que se vive dentro de una novela negra.
Tras participar del Cuarto Festival de Novela Policial de Toulouse en Francia junto a distintos escritores de Inglaterra, Islandia y Suecia, el escritor chileno se movió para París, donde llevo adelante una serie de charlas y adelantó la publicación durante el próximo año de El Segundo deseo (Métailié). A su vez, comenzará a incursionar en la presentación de libros en formato electrónico, y su primera prueba llegará justamente con dicho relato, el cual fue editado en Chile durante el año 2006.
El escritor a su vez, ha sabido reconocer la gran recepción de su obra en Francia, ya que según él, a los lectores de allí les interesa la personalidad de su protagonista, además de la recreación del contexto socio político de Chile.
El detective privado más famoso de la saga de Díaz Eterovic, ha sabido actuar en hechos durante el régimen de Pinochet relacionados a la represión en Nadie sabe más que los muertos y El ojo del alma.
Parece que la última novela de este autor pinta más que bien, aunque sería mejor comenzar de a poco a conocer la vida de su detective, que ya cuenta con varios relatos, en donde él y su gato Simenon se embarcan en unas aventuras que parecen no tener solución.
