Traducción al griego: Stelios Karayanis.
Traducción al portugués: José Hilton Rosa.
Ilustraciones de carátulas: Martin Oseayo.
Diseño e impresión:
Víctor Ataucuri García
Hay autores que llevan hasta las últimas consecuencias un alto grado de amistad con su propia obra, con sus primeros motivos líricos que se comportan como sombras o vivas imágenes entresacadas del espejo. En el caso de Santiago Risso un poema, además de ser una construcción verbal, tiene la cualidad de ser un organismo vivo del que no se puede prescindir, y a quien le une una ruta de vieja amistad, tal como se aprecia, por ejemplo, con su poema símbolo “Estalactita” que aparece casi en todos sus libros publicados, así como en plaquetas y antologías.
Santiago Risso
En esta línea afectiva también destacan “La soledad”, “Bogo”, “Mujer impresa”, “Reino de la vida”, “El mar” “Pax: vox clamantis in deserto”, etc., textos que regularmente saltan de libro en libro. Y junto a ellos, claro, aparecen poemas nuevos que enlazados dan un corpus sostenido al mensaje del autor. Pareciera que intenta con ello, afianzar libros a la medida de su postura entrañable con la vida y el arte. Por ello, esta manera de convocar y aglomerar poemas de su primera etapa con otros últimos, no lo hace reiterativo, sino está siendo consecuente con su forma de ser y estar en el mundo.
Y esto se advierte en Mujer impresa y Culto al cuerpo y otros poemas, el primero traducido al griego y el segundo al portugués. Como es de suponerse aparecen, a doble partida, dichos textos aludidos que ahora se han hecho carne, y actúan como armazón de ambos libros. La escritura para Risso es un acto de amistad, a pesar de que algunos poemas tienen un dejo solitario, y el poeta se siente como un “convidado de piedra” o una “estalactita desprendida”, pero ello no lo inhibe de comunicarse con “el otro” desde una visceral dimensión metafísica: “La soledad es conocer tu nombre/ y no poderlo pronunciar”. En la lucha diaria de persistir en lo humano y no caer en el error, el poeta se refrena, se sujeta de la palabra para encomendarse en “el reino de la vida”:
Maestro
estoy posando
sobre la cuerda
entre el cielo y el infierno
y el abismo
es tan oscuro
que si caigo
y grito tu nombre
no me escucharás.
Empero, será el tono fraterno, esperanzador, abierto a los demás el que mejor expresa el sentir del vate, con palabras que contienen una profunda carga y descarga afectiva al dar vida a pequeños actos de gran trascendencia:
“Hay gestos cotidianos que de pronto cambian el mundo.
El señor de lentes grandes y camión grande me cedió el paso.
Hice yo un gesto reverente y seguí mi camino más contento
que ayer.
Solamente un cruce de miradas y ningún semáforo,
fue la convención de la humanidad,
fue la levedad inesperada en una ciudad de actitudes
desesperadas”
(Cruce de humanidad)
En su travesía por el jardín del lenguaje el poeta le gusta sentirse acompañado por una floración de imágenes y metáforas, que le dan a su estilo un aire lúdico y un trazo claro, nervioso. Siempre está en vena creativa y tiene en su haber muchos poemas sueltos e inéditos. Fácilmente pasa de una zona lírica a otra: poesía amorosa, visual, vanguardia, haikus, piedra-poemas. Son muchos los ejemplos de este alud metafórico, del que el autor se siente tributario:
“una alberca altiva amansaba el estío,
y mi frente es un acantilado”.
(Bogo)
“El sol es un
lagarto
que derrama
sus mañanas”.
(El mar)
En estos dos trabajos recientes, el autor destaca el culto a la mujer y a la amada poesía cuya fascinación se desarrolla en el cuerpo del poema, que permanentemente ensaya como leitmotiv. Mujer impresa (que es una “breve antología”) es el goce físico y espiritual de la palabra. Por su parte, Culto al cuerpo y otros poemas es un velado homenaje a Jorge Eduardo Eielson, el de “Noche oscura del cuerpo”, y remite al culto del propio lenguaje. Dos libros entroncados, casi gemelos, por la visión humanista y la sensualidad del acto poético.
www.letras.mysite.com: Página chilena al servicio de la cultura
dirigida por Luis Martinez Solorza. e-mail: letras.s5.com@gmail.com A VISTA DE PÁJARO:
"Mujer impresa" (2024), "Culto al cuerpo y otros poemas", (2025) de Santiago Risso.
Por Antonio Sarmiento.