Plazas, parques y puentes, de Horacio Eloy, publicado por Mago Editores en 2008, es un poemario que recorre el Santiago antiguo. A través de sus páginas, las plazas, los parques y los puentes se transforman en escenarios cargados de historia, memoria y vida cotidiana.
Horacio Eloy, nacido en Santiago de Chile en 1955, es un poeta y cronista urbano cuya obra ha explorado desde siempre los espacios de la ciudad y la memoria colectiva. Ha publicado varios libros de poesía y ha participado en antologías chilenas contemporáneas, consolidándose como una voz que combina sensibilidad urbana con conciencia histórica. Su escritura se caracteriza por un lenguaje directo, íntimo y evocador, capaz de hacer que los lugares cotidianos se conviertan en testigos de experiencias humanas universales.
Horacio Eloy
Eloy convierte la ciudad en un paisaje íntimo y colectivo: las calles, los puentes y hasta los cines funcionan como testigos de encuentros, ausencias y transformaciones. Cada poema reconstruye la memoria urbana, capturando lo que permanece en los espacios cotidianos y lo que inevitablemente se pierde con el paso del tiempo.
Entre los textos que conforman el libro, Cine Minerva destaca como una pieza central. En este poema, Eloy evoca la sala de cine desaparecida en la intersección de San Pablo y Chacabuco, escenario de un amor adolescente y de miradas furtivas que atraviesan la historia personal y la colectiva. La ternura de la memoria se entrelaza con la nostalgia urbana y los vestigios de tiempos difíciles. La frase “ella vive ahora en Rotterdam, él, en el patio 29” convierte ese cine en un puente entre lo vivido y la memoria histórica de la ciudad.
En su conjunto, Plazas, parques y puentes confirma a Horacio Eloy como cronista poético de Santiago, capaz de transformar los espacios cotidianos en relatos líricos donde la memoria, la historia y la emoción se entrelazan, demostrando cómo la poesía puede mantener viva la ciudad dentro de sus páginas.
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